Son las 4:13 de la madrugada del domingo 8 de mayo. Acabo de entrar en casa después de una noche muy prometedora, pero sin duda fracasada, fría , aburrida pero extraordinariamente productiva. Lo es sin duda alguna, aunque las teclas del tablero esten tratando de jugarme una mala pasada. Estoy contenta con mi "locura" y con las experiencias que me tocan vivir, aunque a veces debo confesar: me pinta el comenzar a fluctuar por lo más bajo( como diría el taxista que me trajo hasta mi casa, ya les voy a contar más sobre el tema)
Siento que no tengo control, que no entiendo hasta que vuelva entender, que hay cosas que me distraen más de la cuenta. Es increíble como todo tiene sentido en el momento que tenemos conciencia sobre la conciencia, y al tener un poquitito más claro cómo es esta cuestión del sentido. Hoy hablabamos con el monch y mi hermana cómo es eso de la mirada ajena, y de superar ese juicio, y nos entendemos y es evidente que estamos en la misma... pero por momentos bajamos (subimos?) y perdemos de vista otra vez el objetivo, perdemos la claridad una vez más y al recuperarla sabemos que no estuvo ahi (no etuvimos alli nonstop) desenchufamos para volver, desenchufamos para seguir. Estamos cubiertos por el velo de la ignorancia, esos momentos son secillamente eso , momentos de desconocimiento, de no poder ir mas alla, de no entender. Son sólo esos momentos de olvido que nos acompañan en este camino hacia el despertar , que dura mucho más que una vida, que va mas allá.... Y volviendo a la charla con el taxista , en el viaje me empezó a decir que ese dia habían viajado muchas chicas con él, hizo un gran enfásis en eso, que eran chicas ... y luego me dijo que una de ellas le había pedido que la llevara a un lugar y que la espere, pero que mientras la esperaba que diera la vuelta alrededor de la manzana para no levantar sospechas... El tema es que cuando esta dando la vuelta ve que al salir del lugar , la chica es interceptada por la policía, y que él (el tachero) al ver esto dio una vuelta mas para no quedar pegado, pero no pudo olivar despreocupoadamnete sino que dio una segunda vuelta a la manzana para volver al lugar de los hechos, que ya no delataba nada de lo que había acontecido un minuto antes. Este hombre habia quedado muy acongojado por todo el tema de la injusticia , la impunidad, el reviente del (la) más pichi, todo igual, siempre igual todo lo mismo... lo de siempre.
Y empezó a reflexionar sobre eso, que no era lo que estaba bien , pero que así era la vida... Igual no pudo salir de su estupor...habia quedado sumamemte shockeado por la revelación( o corroboracion, aún no lo sé; no lo sabía en ese momento) sobre las verdades energéticas, aquellos seres que se manejan en las esferas más bajas donde todo acontece entre penumbras y en planos existenciales que están lejos muy lejos de ser parte del ideal...Y que a él nada le habia pasado porque estaba bien, hacia las cosas bien, sabía quién era... tal vez suene muy artificial y condescendiente , pero como testigo de estas palabras,les aseguro que sonaron realmente sinceras, directas, aunque también un poquitín ambiguas.Antes de proceder a mi descenso remató que hacía 15 años que profesaba el budismo y destacó (nuevamente)que lo que le había sorprendido esa noche era la cantidad de chicas que había llevado ( a pesar de que "esta zona es variada y se sube todo tipo de gente") y yo era una de ellas.
