Milico Roca

Estoy escribiendo desde acá General Roca (Río Negro) para describir brevemente los hechos que han acontecido durante esta semana de estudio super productiva. En realidad ahora que lo pienso bien no voy a hablar de lo que aconteció durante la semana si no en la noche de ayer específicamente.... Con La Comunidad (para la/os que no saben se definiría como el grupo de voluntades que alquilan un shancho por acá para no tener que sobregastar; bendito grupo al cual pertenezco)decidió organizar un evento pre-dance (anoten) porque había sido decidido casi unánimemente que ese día los integrantes que así lo quisiesen junto con los invitados que así lo desearan, tuvieran por vez primera la oportunidad de conocer (o revivir, según sea el caso) la noche rokense con todas las letras. La cuestión se sintetiza de la siguiente manera: Fuimos al supermercado (norte) a comprar bebidas: 11 cervezas, algunas gaseosas y vodka, tropicana de naranja y pulpa de frutilla especial para cocktelería .... todo un lujo! (N del A: realmente creo que he descubierto un objetivo a corto plazo en mi vida y es el de propagar dicho trago NN (se aceptan sugerencias) por- mínimo - todo el continente americano). Después de pelearnos con la máquina recibidora de envases por una falta total de funcionamiento, procedimos a retirarnos, por supuesto pasando antes por caja (esto equivale a media hora de cola más , sumada al hecho que nosotra/os eramos lo/as únicas que bufábamos y despotricábamos contra el sistema mercantil de la Pcia.de Shío Negro por permitir que las cajeras contemplaran los productos y los admiraran durante varios minutos sucesivos antes de someterlos al detector láser (lo que nos lleva a pensar por supuesto que nuestro ritmo urbano es un tanto más vertiginoso)Okis, prosigamos. Llegamos a casa, preparamos todo para la ocasiòn hasta que recibimos la llegada de la ùnica camada de invitados.Acto seguido, en lugar del ofrecimiento de birra y productos de copetín , me preparé la mezcla sagrada e inmediatamnete la coloqué en manos del convidado más especial: nuestro profesor. Después del halago por el colorido brebaje nuestro teacher de sintaxis procedió a degustarlo y después de una nimia crítica por la temperatura del mismo, comenzamos a realizar varias mezclas para aquello-as que azorada-os contemplaban semejante preparación para una reunión que había sido organizada de la manera más casual. Copita va copita viene , pizza de por medio y todo, la botella de vodka (léase: su contenido) no tardó más de una hora en desvanecerse. Por suerte la heladera todavía albergaba casi una decena de cervezas , jugos naturales y pulpa colorada. Ante la falta de bebida blanca y el claro sobrante de todo el resto algunos invitados comenzaron a darle a sus vasos de cerveza le coup d'grace con frutilla empulpada.Para ese entonces diversos temas de conversación habían comenzado a surgir: literatura, fútbol y sexo por supuesto, tratando no sólo la heterosexualidad fantástica sino también partiendo de argumentos tales como La homosexualidad es una mera cuestión económica. Debate tras debate , tres y media de la madrugada en el reloj, decidimos que ya era hora de partir hacia el bailongo. John Bull , el único disco-pub de Roca contaría con nuestra presencia (la mía por lo menos)hasta alrededor de las 7 de la mañana. Sí, nuestra misión había sido cumplida , no sólo habíamos ingresado al recinto sin perder medio minuto en la cola (adivinen quién gestionó el pase?) sino que bailamos los super poderosos hits que pasaron toda la noche y que me llevaron a concluir que la noche rokense la mueve , para sorpresa de algunos y deleite del resto. Una hora y media de sueño no conciliaron el cansancio e hicieron la clase que tuvimos el sábado por la mañana un tanto más agotadora, pero como diria el shefrán " Quién nos quita lo bailao!" Una butaca super cómoda y mullidita me estaría esperando esa misma tarde para invitarme a seguir el sueño durante otras 15 horas de regreso a Bs As ...